Diario
de Mallorca. 26/12/2007.
Nadal Antelm cuenta cómo se salvó del hundimiento del
crucero ´Baleares´ y defiende el monumento a sus compañeros
El monumento de sa
Feixina erigido en homenaje a los que murieron en el hundimiento del
crucero Baleares está, más que nunca, en boca de todos. Todo el
mundo tiene una opinión al respecto.
Unos creen, y
defienden desde hace años, que hay que retirarlo y desde el pasado
mes de octubre apelan a la Ley de la Memoria Histórica para ello.
Otros, en cambio, defienden que ese monumento fue erigido gracias a
donaciones voluntarias de los mallorquines y que rememora a víctimas
de la Guerra Civil y que por tanto debe permanecer en pie.
Nadal Antelm se
incluye dentro de este último. Su opinión merece ser escuchada
porque este hombre de 83 años es el último superviviente mallorquín
del buque Baleares, que se hundió tras ser bombardeado por la flota
republicana el 6 de marzo de 1938 frente al Cabo de Palos.
"Que le quiten los símbolos que hacen referencia al
franquismo, pero que no lo quiten, es un monumento que hicieron los
mallorquines con donaciones populares", dice este marinero
retirado que señala además que es "un homenaje a las víctimas
de una guerra".
Nadal tiene la
mente clara y recuerda con nitidez como transcurrió esa noche. Él
era un flecha naval de apenas 14 años que estaba en el crucero
haciendo prácticas, como recompensa por haber sido el número uno
de su promoción en un curso de radio y señales. Así que estaba
allí por casualidad. Y se salvó también casi por casualidad.
Eran las doce y
media de la noche y estaba durmiendo en su colchoneta cuando escuchó
la llamada de zafarrancho de combate. Por pereza, prefirió pensar
que era un simulacro y no acudió a su puesto en la estación del
puente. "Me desperté una hora más tarde por el estruendo de
un torpedo", explica.
El destructor
republicano Lepanto les estaba atacando precisamente por el puente.
Nadal cuenta que "todos los que estaban allí, murieron; yo me
salvé por perezoso".
Una vez en
cubierta, comenzó la lucha por sobrevivir. "Había cierto
caos, pero no pánico", describe Nadal, que asegura que estaba
tranquilo, "no sé si por la inconsciencia de los 14 años".
La tripulación, a oscuras porque el sistema eléctrico ya no
funcionaba, trajinaba cubos de agua para apagar los distintos
fuegos, trataba a los heridos e intentaba hacer balsas "con
cualquier cosa: cajones, pasamanos, las cuerdas de los coys... lo atábamos
y lo tirábamos al mar para tener algo a lo que agarrarnos, porque
los pocos botes salvavidas que había, se rompían porque se tiraban
al agua de cualquier forma", explica.
|
|
No recuerda si,
cómo tantas veces se ha oído, los marineros cantaban el Cara al
sol mientras el buque se iba a pique. "Se veía mucho brío,
energía y sé que se cantaba algo, pero la verdad yo no sé si
canté el Cara al sol, una Salve marinera o Sor Tomaseta",
reconoce.
Cuando se escuchó el ´sálvese quien pueda´, se lanzó al
agua. El recuerdo que más grabado tiene es cuando los ingleses del
destructor ´Boreas´, le "pescaron" . "Estaba
cubierto de petróleo, tenía mucho frío y me quedé acurrucado
como un pollito en el suelo de la lancha", narra,"tardé
varios días en quitarme el petróleo, parecía una gaviota de las
del ´Prestige´", bromea.
"Después, cuando llegó la aviación republicana y nos
bombardeó, sí que pasé miedo", cuenta Antelm, que recuerda
con emoción cuando sus padres le fueron a buscar al puerto y cómo
su madre le abrazó. De los 1.200 hombres que iban en el crucero, sólo
402 llegaron vivos a las costas mallorquinas.
Hoy, en Mallorca sólo
Antelm puede contar en primera persona lo que sucedió aquella noche
en el crucero.
Para honrar a los fallecidos se levantó el monumento de sa
Faixina, hoy en boca de todos por la polémica sobre su pervivencia.
Antelm opina que el monolito dedicado a sus compañeros debe
mantenerse. "Lo hicieron los mallorquines con donaciones
voluntarias, no puede quitarse", indica, "es un homenaje a
víctimas de una guerra". Señala que le deberían quitar los símbolos
que hacen referencia al franquismo, pero que no lo retiren.
INICIO
|