Hace unos días uno de los perros de presa de los medios de comunicación era denunciado por el presidente de la AVT y su esposa, por sus mentiras y difamaciones sobre sus personas.

Hoy, uno de estos medios de la ultra-izquierda a cuya cabeza está el Director de la Cadena SER Sr. Daniel Anido, escupe su bilis intelectual sobre todos aquellos que no piensan como él en diversidad de temas y no han apoyado sus escupitajos mentirosos sobre el 11-M, ¿dónde estaban los terroristas suicidas, dónde estaba el golpe de estado? pero ¿qué se puede esperar de un individuo radical y marioneta del sistema ultra? Cuando el coeficiente intelectual no da para más ante las verdades, sólo les queda el recurso del insulto gratuito, recompensado por los aplausos de todos sus lectores, ávidos de “chorradas” y “agresiones” a todos aquellos que sobresalen del pensamiento único instituido por la ultra-izquierda; la cual, nunca a tolerado la democracia, sino que siempre ha usado los sistemas políticos, para intentar imponer sus ancestrales y caducas doctrinas marxistas.

La cuestión de este barriobajero director de la cadena radiofónica es que ha escrito en la página web de la citada cadena, un panfleto soez y chabacano, diciendo: “Cuando fluye la baba y el periodismo se acojona la tiniebla va cubriendo el espacio vacío; un territorio abandonado que ocupan pajilleros, reprimidos, grasientos, puteros, siniestros, cobardes y acomplejados, con nombres y apellidos” para seguidamente nombrar a los periodistas a los que insulta y desprecia: “Son de ilustres burgos, ansones, losantos, pejotas, usias y alguna que otra schlichting ..” ¿de dónde viene ahora la crispación? ¿no era la derecha la que usaba sus medios para insultar y crear un clima guerra civilista en España? ¿No decía hace poco El País: “No deberíamos propiciar ni alentar insultos y descalificaciones entre profesionales. No es nuestro estilo" ?  Ese día no asistió a la lección en la cantina, qué fallo.

Otra de sus lindezas: “Cuando el periodismo se acojona delante de estos usurpadores del oficio, la cloaca extiende su dominio, se adueña de la plaza pública y construye allí su pasatiempo favorito: el juego delictivo del insulto, donde prevalece y se premia la discriminación por razón de nacimiento, raza, sexo, religión, opinión o cualquier otra condición o circunstancia personal o social, como pueden ser la orientación sexual, la fe o falta de ella, la ideología, la gestación, la edad, el nombre o el apellido”. ¿A este Señor lo eligieron para tal cargo por ser tonto o por ganar el premio al mejor ignorante? Se cree el ladrón que todos son de su condición. ¿quién insulta a los católicos o a la Iglesia Católica o a las personas de derechas? Estos individuos de la extrema-izquierda con su ilustre literatura, siguen manifestando que la cabeza la usan para llevar pelo y que su colegio ha sido y es, la taberna del barrio.