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Por
AguilaES.
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Otra película del
excrementicio y subvencionado cine español, ¿Iban a cambiar las
cosas después de más de 20 años? No. Seguimos con lo mismo: la
guerra civil cuando hablamos de dramas, y la escatología y el mal
gusto cuando hablamos de comedias. Ésta vez se nos amenaza con una
nueva película titulada “La Buena Nueva”, dirigida por una
directora, que quizá es conocida en su casa a la hora de comer,
pero claro, en el subvencionado cine español, al cual incluso
acuden neodirectorcillos extranjeros buscando el rancho y la sopa de
las subvenciones, cada día aparece un director de cine nuevo.
Cualquiera de nosotros con un poco de suerte puede serlo, poniendo
el cazo y la escudilla; eso si, quizá haya que cumplir una serie de
requisitos en cuanto a la temática de las películas, porque son
todas similares, o quizá haya que cumplir los requisitos en cuanto
a la ideología personal del director.
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Nunca el cine español había
sido tan político como ahora. Nos cacarean una sociedad
“limpia”, “ideal”, “pacífica” y resulta que la política
y el enfrentamiento ideológico nos corroen por todas partes,
incluso en el cine. No conozco ninguna película de la época de
Franco en la cual se haga contra los vencidos de la guerra la
demagogia y la torticería que se hace en el cine del régimen
actual contra los vencedores, lo cual da una muestra más de que las
intenciones de aquel régimen eran el olvido y la pacificación y
las de ahora, la revancha y la crispación.
Según los informativos, la
película titulada “La buena Nueva” trata de un cura que ejerce
durante la guerra en la zona Nacional y que es un firme defensor del
Evangelio frente a las “Atrocidades que se cometen en nombre de la
religión en su zona” y se acaba identificando con los “represaliados”.
Ésta película en principio
viene con las mismas intenciones que sus antecesoras sobre el tema
de la guerra civil: demonizar al bando Nacional y enaltecer al
republicano; pero además en el año en que estamos, tiene otro
importantísimo objetivo propagandístico más: Estamos en tiempos
de crispación por la Memoria Histórica, y contra ésta
“Memoria” izquierdista, están respondiendo muchos recordando el
genocidio anticatólico, Paracuellos, etc. y el Vaticano continúa
su excelsa labor de canonización y beatificación de mártires
religiosos. Todo esto hace que los argumentos de la izquierda se
tambaleen. Es entonces cuando aparecerá la película “La Buena
Nueva” viniendo a transmitir al público que duda, un mensaje como
diciendo que “El espíritu verdaderamente cristiano y evangélico,
nunca es compatible con el atroz y fascista Bando Nacional”, que
los curas que apoyaron al bando Nacional no eran buenos cristianos,
que el bando Nacional en definitiva se apropió de la religión. El
mensaje es muy claro. La propaganda feroz… y mentirosa e infame.
El bando Nacional fue el que
protegió a la religión y al Evangelio de su destrucción total, y
las atrocidades las cometieron los republicanos precisamente muchas
veces contra curas que eran paupérrimos y que educaban, vestían y
alimentaban a pobres. Los marxistas nunca pudieron consentir que los
curas hiciesen labores humanitarias de las que ellos se creían dueños
absolutos. De ésa forma podían comerles a los obreros más el
coco.
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Generalísimo.
