Zapatero
el cruel.
Por José Gabriel.
Antes eran los
llantos de los huérfanos, viudas, familiares, amigos y
compatriotas, los que causaban la sonrisa de los asesinos; ahora,
son también las decisiones de Zapatero, las que provocan la
alegría de los terroristas e incrementan el escarnio de las
victimas.
Zapatero se ha
desenmascarado definitivamente y se ha mostrado como el tirano que
todos intuíamos. Por un lado, demuestra su osadía, que no valor, y
realiza concesiones a sus amigos terroristas a pesar del feo que le
han hecho con el último atentado en Madrid. Por otro, no puede
ocultar su profunda cobardía y se refugia en los faldones del
Ministro Rubalcaba, sujeto, que en su día, fue portavoz del
gobierno corrupto, torturador y asesino que presidió el endiosado
Felipe González.
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El Estado llevaba
tiempo sin ceder al chantaje terrorista, y a causa de ello, ETA,
además de romper sus pseudo treguas, asesinó a
Miguel Ángel Blanco. Pero he dicho que llevaba tiempo: hay que
recordar, como ETA amenazó con asesinar en Febrero del 81 al
ingeniero José María Ryan si no se cerraba la central de Lemóniz;
el gobierno se mantuvo firme, ETA cumplió su amenaza, y después,
cuando el PSOE ganó las elecciones, las obras se paralizaron,
logrando así sus objetivos los terroristas, y resultando inútil la
muerte del ingeniero.
Con la presente
situación, casi se logra igualar la crueldad institucional de los
tiempos de la traidora transición, cuando las Cortes en pleno,
incluida entonces, esa derecha que ahora se muestra tan indignada,
aplaudían la amnistía concedida a los predecesores de De Juana.
Curiosamente, pocos años después, aquellos
primeros gobiernos de la “democracia”, tras liberar a los
criminales y terminar con la justa pena de muerte, trataron de
combatir los desmadres de sus amnistiados, con el terrorismo de
Estado…… ¡Todo un ejemplo de agudeza y criterio!
Algunos tratan ahora
de justificar o respaldar esta medida aludiendo a su carácter
humanitario, mientras otros, que se quieren hacer pasar por más
listos, nos explican lo conveniente que es no crear “mártires”;
nos dicen que de este modo, se evitarán revueltas callejeras y se
les quitarán argumentos a los “violentos”. Si alguno de verdad
se cree esto, debería tomar barbitúricos hasta la sedación, más
que nada, para dejar de decir majaderías. Esta
morralla, entiende que el Estado no puede ceder ante el chantaje
frente a un secuestro que amenace la vida de un inocente, ahora
bien, si la vida que corre peligro y por propia voluntad, es la del
secuestrador, entonces, todo vale……¡Esto es una infamia!
Los asesinos de ETA
no necesitan de excusas para homenajear a sus muertos. La nómina de “mártires” etarras, esta repleta de accidentes de
tráfico, mala manipulación de explosivos, SIDA, sobredosis y ajustes de cuentas entre ellos; también, no podemos
olvidarlo, está nutrida por los muertos habidos en algún tiroteo
con la policía mientras los “valientes terroristas” huían como
ratas, además de los asesinos, justamente ejecutados durante el
Movimiento Nacional y a los que el actual sistema ha
entronizado a la categoría de “luchadores por la libertad”.
Todos estos “mártires”, conviene recordarlo, siempre fueron
debidamente acompañados por la comprensión de una hez de Satanás,
que respondía a la denominación de Obispo Setién.
Tengo también una
cosa clara: prefiero un “mártir”, cuando lo es de esta calaña,
a un “héroe. A los mártires, se les pone flores, se les canta un
poco y se escribe (si se sabe) sobre ellos; mientras que a los
héroes vivos, además de todo lo anterior, se les consulta, sigue y
obedece.
Ahora, Zapatero y su
gobierno han convertido a De Juana en un “héroe”, y lo malo, es
que tienen motivos para
considerarlo así sus tolerados seguidores. De Juana ha vencido con
su actitud, a todos los españoles de bien y va a ser recibido a lo
grande por sus excitados mamporreros; ha vencido, además, con la ayuda indispensable
de Zapatero.
No se puede pensar
que el presidente es tonto y ha tratado de buscar una solución lo
menos mala posible; no se puede ser tan tonto, pero sí se puede ser
tan cómplice. Zapatero, tienen razón los socialistas, no ha cedido
a ningún chantaje, sencillamente, ha ayudado en sus
intenciones a la banda asesina.
Los gobiernos del
Estado, llevan años siendo el principal enemigo de la Nación, y,
el poder judicial con sus actuaciones dirigidas, lleva demasiado
tiempo siendo el enemigo número uno de la justicia. Resulta nocivo,
leer la sentencia del Tribunal Supremo en la que no consideran
terroristas las amenazas efectuadas por De Juana.
La Directora de
Instituciones Penitenciarias, ha declarado que esta medida es
excepcional; en ningún caso se va a aplicar a los demás presos. La
pregunta es evidente: ¿Por qué no pueden chantajear los demás?
¿Hay estar orgulloso de ser un asesino para que Zapatero te ayude?
¿Hay que pertenecer a banda armada? ¿Hay que compartir objetivos
políticos con el presidente? Señora directora: ¡No hacían falta
más sandeces! ¡Estábamos servidos!
El Sistema y su
actual Gobierno, con el siniestro Rubalcaba y Zapatero a la cabeza,
han sido y son, colaboradores necesarios del terrorismo en España.
Todas las medidas tomadas por Zapatero, han ido encaminadas a
aliviar la situación de la banda terrorista y buscarles un futuro
viable.
Con todo, hay que
tener esperanza y pensar que los caminos de la justicia son
inescrutables, y tal vez el quedar en situación de “prisión
atenuada” e inminente libertad, sea la única manera de que al
engendro de De Juana le llegue la justicia que merece, ya que en la
calle no dispondrá de la protección de las fuerzas de seguridad.
También hay que esperar en la
histórica capacidad que tiene la izquierda para purgarse. Dice la
sabiduría popular: «Cría cuervos y te sacarán los ojos».
Debería meditar Zapatero sobre esta cuestión, ya que el dicho se
cumple más veces de las que parece, si no, que se lo pregunte a
su desaparecido amigo Ernest Luch.
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