Comunicado del S.E.U.
|
El Consejo de
Gobierno de la Universidad de Valladolid, presidido por su Rector el
Excmo. y Mgfco. Jesús María Sanz Serna, ha aprobado una
enmienda presentada por los laicistas de Alternativa Universitaria
(la aborrecible asociación pseudocultural que se caracteriza porque
sus afiliados tienen más de treinta años y no aprueban ni a la de
tres) por la que se suspenderán el próximo curso académico las
asignaturas de libre elección ofertadas por el Aula de Teología de
la Institución Académica.
La propuesta de
estos agradecidos del comunismo, sometida a votación el pasado 28
de marzo, obtuvo tan sólo 11 votos a favor, 6 en contra y un total
de 26 abstenciones, por lo que se aprueba sólo con el 25% de los
votos.
|
|
De nuevo, es la
Universidad de Valladolid “la 7 veces centenaria”, la que riza
el rizo cometiendo un nuevo atropello contra la moral de los católicos.
Primero fue la colaboración con las locas y camioneros de la
Fundación Triángulo en ciclos de cine filopornográfico, luego la
inserción de propaganda la proabortista de la Cínica Ginemédica
en las guías que se reparten a cada alumno con la matrícula, después
la investidura de Carrillo como “Residente de Honor” de la
Residencia Universitaria Alfonso VIII, dependiente de la propia UVA,
y ahora este atropello que va convirtiéndose ya en persecución.
Los estudiantes
falangistas entendemos que esta decisión se contrapone, por un
lado, al contenido específico de la libertad académica en el ámbito
universitario, que se manifiesta en las libertades de cátedra, de
investigación y de estudio (Ley Orgánica 6/2001, de 21 de
diciembre, de Universidades, art.2.3.), en cuanto que anulan las
ofertas educativas del Aula de Teología de su propia Universidad.
Por otro lado, el
argumento esgrimido de universidad “laica y aconfesional” ignora
el artículo 16 de la afamada Constitución, sobre la libertad ideológica,
religiosa y de culto. En concreto, el mencionado artículo, recoge
en su apartado 3 la actitud positiva de los poderes públicos con
referencia a las creencias religiosas de la sociedad
española.
Más de 550 estudiantes, eligieron las asignaturas de esta cátedra
el pasado curso, por lo que eliminar esta opción supone ignorar una
de las elecciones más demandada por los estudiantes de su
Universidad.
Ante estos datos, y teniendo en cuenta que el 60% del Consejo de Gobierno
no se ha pronunciado, no encontramos justificación a una medida
arbitraria, intolerante y contraria al espíritu de universalidad
que caracteriza a la institución académica.
Resulta doloroso ver como una institución, que debe velar por la
cultura y el conocimiento, prefiere permitir los macrobotellones en
sus instalaciones, y el fomento de las bajas pasiones antes que
educar y formar las generaciones del futuro. Gracias Sanz Serna, que
Dios te lo pague como bien mereces.
INICIO
|
Generalísimo.
