Excelentísimo Señor:
Jamás de los jamases me he preocupado de los problemas que atañen al
Ayuntamiento madrileño, que comanda usted, desde hace una jartá
de tiempo.
Han
sido unos acontecimientos recientes, los que me han hecho dirigirle
estas letras, debido a mi condición de contribuyente que aporta unos
obligados impuestos para que los políticos -incluidos- os llevéis
los sueldos que se os ponga en la mismísima.
Que, por cierto, me gustaría conocer que regla rige los sueldazos de
los altos cargos de gestión de este puteado país. Ya que cada dos
días, la cantidad que se lleva usted, Señor, equivale,
aproximadamente, al sueldo mínimo interprofesional de 624 euros
mensuales. Es decir, ¿por qué su sueldo es de 100.843 euros anuales;
8.395,25 cada mes? Cerca del millón y medio de las antiguas pesetas.
Por
lo que no es extraño, que los militantes de los partidos políticos
españoles -todos- os transforméis en malvados de perversa condición
-con faca en la faja ellos y en la liga ellas-, cuando llega la hora
de alcanzar los sueldazos que habéis establecido en cualquiera de
los múltiples puestos de mando.
Puesto de gestión política, que una vez alcanzado, puede darse el
increíble caso, de que un ser, como usted, con su indiscutible aire
juvenil de niño pijo del antiguo régimen -dicho sea sin animus
injuriandi-, se halla entregado tan dócilmente a la petición de
la concejala comunista Doña, Milagros Hernández, para hacer
desaparecer de la ciudad todo vestigio del General Don Francisco
Franco Bahamonde.
Tales como LOS MUY LACERANTES: alcalde honorífico, hijo adoptivo de
la ciudad o Medalla de Oro, dando aplicación a la cachondísima Ley
de Memoria Histórica.
Ya
que la edil de IU Milagros Hernández instó al Grupo Municipal
Popular a “dejar claro ya, que no tolera el terrorismo ni tampoco el
fascismo, porque ambas son contrarias al sistema democrático que se
quiere para la ciudad”.
“Ante la evidencia -recalcó- de que hay personas que lucharon por la
democracia en la ciudad sin reconocimiento alguno tenemos que dejar
limpio de apoyos a los dictadores en las instituciones democráticas,
e iniciar una nueva etapa de aplicación justa y objetiva de la Ley
de Memoria Histórica”, planteó. Añadiendo además su preocupación por
el “resurgimiento de movimientos nazis” en los últimos años, un
fenómeno “súper preocupante” al que el Consistorio “deberá hacer
frente”. Todos los párrafos de la concejala los he copiado tal
cual.
Vamos, que esta comunista hable en contra del fascismo y de los
dictadores, defendiendo el sistema democrático, es para vomitar. Y
es que como lo suyo es tocar teclas, no habrá oído hablar ni de
Stalin ni de Mao Tse Tung, dos demócratas ejemplares que sólo
asesinaron a cientos de millones de ciudadanos, democráticamente,
como todo el mundo sabe.
Y
que esta pianista pase en silencio el estercolero dictatorial que
tenemos como Parlamento español, en el que moran sus compinches de
partido, sin decir esta boquita es mía; es también para echar la
primera papilla que nos dio nuestra santa madre. Y es que a esta
señora le agrada la dictadura que tenemos en la actualidad porque
está chupando de ella |
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Señor, para mí, el GENERALÍSIMO FRANCO es un ídolo militar; ya que
fue fundador y comandante de la primera Bandera de La Legión, en la
que ingresé en el año 1948. Militar que se pasó toda su juventud
luchando en África, donde estuvo a punto de morir desangrado, con
las tripas fuera. Y estoy hasta la coronilla de oír a babosos
trincones y babosas insaciables, zahiriendo al ya fallecido
GENERALÍSIMO FRANCO, que murió hace 34 años. Muletilla que utilizan
para disimular lo que nos están robando.
Como usted sabe, al General Franco lo llamó el Presidente de la
Republica Azaña, para que aplacara la revolución comunista de
Asturias en el año 1934. Por lo que el General Franco, obedeciendo
órdenes, defendió a la República que quisieron derrocar aquellas
sanguijuelas, para establecer un régimen comunista de manos de
Stalin, que estaba en su apogeo.
Más
tarde, dos años después, en 1936, al ganar la elecciones Gil Robles
de la derecha, toda la bahorrina se sublevó contra aquella votación,
queriendo derrocar a la república otra vez, cometiendo asesinatos a
mansalva y trayendo desbarajuste social que obligó a que los
militares tomaran parte en el problema.
Decisión que, en un primer momento, rechazo el General Franco,
sugiriéndole al General Sanjurjo –cabeza principal del alzamiento-,
que era mejor esperar a ver si los políticos eran capaces de
hacerse con el control.
Y
como fue imposible recomponer aquel desaguisado, se inicio la lucha
en defensa de España. Lucha encabezada por el General Sanjurjo que
murió el 20 de julio de 1936 en un accidente de aviación; siendo
sustituido por el General Mola que también murió en otro accidente
de aviación.
Y
fueron los generales los que se reunieron y votaron democráticamente
que el General Franco se hiciera responsable de la lucha
nombrándolo GENERALÍSIMO DE TODOS LOS EJÉRCITOS. ¿Vale?
Y
ya está bien -culpa de los dirigentes blandengues y falsarios que
tenemos- de culpar al General Franco de haber asesinado a nadie. Es
rotundamente falso. El General Franco no asesinó ni ordenó asesinar
a ninguna persona. Ese no era su estilo. El lucho en África,
jugándose la vida en múltiples ocasiones, como ya he dicho. Y se
paso los tres años de guerra en las trincheras dirigiendo los
combates. El General Franco era un hombre pequeño de estatura pero
con dos cojones que no cabían en un campo de fútbol.
Por
lo que terminado el conflicto y establecido el Estado, fueron los
fiscales y jueces los que mandaron a sus casas a los que tenían las
manos limpias y sentenciaron a muerte a los que tenían las manos
llenas de sangre por haber asesinado a cientos de españoles y
españolas que no eran de su cuerda, en las centenares checas que
tenían en pisos de Madrid, por ejemplo. Fue la justicia la que
impuso su veredicto, con las normas establecidas que no legisló el
General Franco.
Por
cierto, ¿sabe usted si la tal Milagros Hernández, ha rechazado la
paga extraordinaria franquista que hemos cobrado en junio? Que es
la que se creó para celebrar el día del Alzamiento Nacional que fue
el 18 de Julio. Y que los demócratas la han traído al mes de junio
para despistar. Porque si rechaza los atributos dedicados al General
Franco, ¿por qué no rechaza también las pagas extraordinarias que
creó él? Menudas lagartas tenemos en la política.
Por
cierto no estoy de acuerdo con la protesta de su suegro D. José
Utrera Molina, cuando al final manifiesta: “Insisto en que pretendo
única y exclusivamente emitir mi opinión sin ánimo de ofensa a
nadie, sin pretender ninguna descalificación política”.
Es
mío que si al principio se considera ofendido, es porque ha habido
una ofensa; por tanto a que viene la explicación de que emite su
opinión sin ánimo de ofensa a nadie. Ha de decir lo que siente y al
que no le guste que beba agua. No hay porque curarse en salud. No
tenemos remedio.
Y
para que se entere esta concejala comunista -posiblemente habla por
oídas- durante los cuarenta años que gobernó el GENERALÍSIMO FRANCO
-ya lo dije otra vez-, no hubo ladrones porque no hubo políticos. Y
fue el mejor periodo político que vivió España desde los primeros
pobladores. A pesar de las necesidades que pasamos, tras robarnos
sus antiguos coleguillas todo el oro, plata y otras joyas que
teníamos como erario público en el BANCO de ESPAÑA; que se llevaron
a Rusia y Méjico.
Otra cosa Señor. Hace días se ha celebrado el ruidoso y repelente
barullo que nos trae todos los años el Orgullo Gay. Es decir, el
orgullo de tomar por el culo. Cosa que a cualquier hijo de vecino se
le pone la carne de gallina, ya que no es entendible que se utilice
el vocablo Orgullo en el tomar; cuando lo correcto sería utilizarlo
para proclamar el no tomar por allí.
Que
por cierto, usted como alcalde debería convocar una manifestación en
la defensa Orgullosa de no tomar por el sitio. Ya que sería
conveniente conocer en que medida ha crecido la panda desde que
llegó la democracia. Que debe haber crecido a base de bien; ya que
en esta ocasión fueron 121.000 kilos de basura la que dejaron en las
calles.
Señor, como usted muy bien conoce, el hombre nace con una cosa
llamada pene (del
latín penis, que
significa "cola"), para dos únicas funciones: excretar la orina y
procrear vida. Y que usted y yo sepamos por un ano -pozo negro- sólo
puede salir mierda. De donde se deduce que el empleo de la cosa en
el mariconeo es una anormalidad, una aberración, un vicio asqueroso
y repugnante, una utilización fuera de toda razón; por consiguiente
-insisto- ¿Orgullo, de qué? ¿Y por qué sois los políticos tan
receptores a tamaña guarrada?
Lo
que deberíais hacer los políticos –si los significados no participan
en la procreación de la humanidad en la que viven-, es buscarle un
territorio en el que ellos fundaran un País, para que vivieran como
les de la gana y no tuvieran que celebrar el día del Orgullo Gay.
País, al que se irían incorporando todos los de su cuerda que fueran
naciendo.
Reciba un cálido y afectuoso
saludo.
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