Los españoles
estamos asistiendo a un periodo de nuestra historia contemporánea,
realmente inquietante y muy preocupante.
Por primera vez en
una democracia, que un presidente del gobierno no condena los actos
terroristas e incluso se hace cómplice de los mismos: “el que
calla otorga”.
Desde que los
sanguinarios de ETA han decidido hacer una “alto el fuego
permanente”, para reorganizarse y tomar posiciones cómodamente,
sin que las Fuerzas de Seguridad del Estado, les puedan poner obstáculos,
todo ello gracias al desGobierno del Sr. Rodríguez, que ha dado
ordenes a las Fuerzas de Seguridad que no haya detenciones del mundo
aberchale.
Pero los
sanguinarios de ETA han dado muestras una y otra vez que esta tregua
es una trampa, para rearmarse y llenarse el bolsillo de buenos
millones, para continuar con sus fines asesinos.
Como dice Jesucristo
en el evangelio: “por sus frutos los conoceréis”. Unos días
antes de la anunciada tregua, ETA robo miles de matriculas y una
furgoneta en Francia, también en Francia, la Policía gala ha dado
a conocer en numerosas ocasiones que los carroñeros etarras se están
entrenando y organizando. En España siguen mandando cartas a los
empresarios, con amenazas y exigiendo el pago del impuesto asesino.
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Por
último, las dos acciones que ya han desenmascarado la mentira de
los sanguinarios de ETA, ha sido el ataque y destrucción de la
ferretería de un concejal de la UPN, en la localidad de Barañaín,
causando heridas a tres policías municipales y a un bebé, que
fueron hospitalizados. Y en la noche de ayer cuatro encapuchados
lanzaban cuatro cócteles molotov contra una oficina de Mapfre en
Guecho (Vizcaya). Además, llenaron el lugar de octavillas pidiendo
la liberación del detenido por llevar bonos para ETA.
Dos ejemplos gráficos
de lo que ETA llama “alto el fuego permanente”, será para los
que piensan como ellos, pero todos aquellos que no pensamos como
estos carroñeros estamos en peligro, hoy más que nunca, ya que las
Fuerzas de Seguridad del Estado, por mandato del desGobierno, no nos
van a proteger de estas alimañas asesinas, las que están
“campando” a sus anchas por el territorio nacional y realizando
sus acciones terroristas de extorsión y amenazas con total
impunidad.
Si el gobierno
actual no protege a los españoles de la lacra terrorista, tendremos
que pensar en buscar protección para nuestros familiares y nuestros
negocios. Hoy más que nunca estamos indefensos, ante unos buitres
sedientos de sangre y dolor.
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