HOMENAJE
"SORPRESA" A SANTIAGO CARRILLO
Por Eduardo Palomar
Baró.
Cena “sorpresa” al demócrata Carrillo
El miércoles 16 de marzo de 2005 tuvo lugar una
emocionante y vibrante ‘fiesta sorpresa’ que el rojerío imperante
dedicó al dinosaurio asesino Santiago Carrillo Solares, marqués de
Paracuellos de Jarama, por sus ejemplares 90 años al servicio de las
libertades comunistas y a la democracia que le imbuyó ‘Papaíto
Stalin’ y posteriormente aquel otro angelito de Nicolae Ceaucescu (de
quien recibió un despampanante coche), transcurriendo su dilatada y
beatífica vida en una trayectoria exquisita de bien hacer, amor y
delicadeza para con el prójimo, aunque éste fuesen de ideología
opuesta a la suya. Así pues, reunía suficientes motivos para dedicarle
ese y otros 90 homenajes más. El chico se lo merecía..
Para que no le diese un soponcio, la denominada
‘fiesta sorpresa’ no tuvo nada de eso, y tanto es así, que
‘don’ Santiago llevaba escrito el discurso de agradecimiento. Y es
que eso de engañar y contar embustes, a los socialistas les va de
maravilla. Son unos fuera serie, unas verdaderas ‘figuras’.
Carrillo ha reunido y reúne todas las
condiciones para dispensarle un homenaje, entre otras cosas por su buen
quehacer político, su transparente, diáfana y ejemplar vida dedicada
primero al socialismo, para pasar luego al Partido Comunista, en el cual
llegó a ser secretario general, para más tarde, en 1986, ser expulsado
del Partido, fundando con sus seguidores más fieles un grupúsculo
llamado Partido de los Trabajadores de España, que se fusionó con el
PSOE en 1991, tras un total fracaso en las urnas, cobijándose en la
casa común de la rosa y el puño.
Este maravilloso y enternecedor homenaje a tan
singular personalidad, a ese Carrillo que Felipe González lo definió
en su día “como un pequeño saco relleno de maldad”, le organizaron
el festejo el locutor de la Cadena SER Iñaki Gabilondo, al servicio de
Polanco (Jesús del Gran Poder) y María Antonia Iglesias, más conocida
como “la Albóndiga”, así como las periodistas Susana Olmo y Amalia
Sánchez Sampedro, que le regalaron un reloj de plata y unos recortes de
prensa titulado “Noventa años de historia y vida” (hubiese sido más
acorde suplir lo de ‘vida’ por ‘muerte’). Malas lenguas, sin
lugar a dudas, fascistas, dicen que no aparecía ninguna nota sobre un
lugar llamado Paracuellos y tampoco noticia alguna sobre aquellos héroes
que mandó ‘don’ Santiago, una vez finalizada la guerra civil, a
luchar contra Franco, con el fin de liberar España, a manos de los
bandoleros maquis, que imitando a su jefe -que
como es lógico los dirigía desde una lejana barrera-
se dedicaron a asesinar al que se les ponía por delante y no eran de
los “suyos”.
Lista de asistentes
No se ha sabido, hasta el momento, quien corrió
con los gastos de tan memorable cena, pero la lista de invitados fue
sorprendente (si es que aún, a estas alturas de la película, uno se
puede sorprender de algo). Figuraban, entre otros, el presidente del
Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, alias “El Talante”;
la vicepresidenta María Teresa Fernández de la Vega y también
presidenta de los modelos ‘Vogue’ en representación de las
ministras del partido de “la famélica legión”, y que según una
maldad de Francisco Umbral “es de la generación de Shirley Temple”;
el ‘xuletari’ separatistas y otras hierbas Juan José Ibarretxe; el
presidente de la Junta de Extremadura, el ‘bellotari’ Juan Carlos
Rodríguez Ibarra; el ex ‘molt honorable president de la Generalitat
de Catalunya’ Jordi Pujol, tan ´lince’ él, que calificó a Javier
de la Rosa como “empresario modelo”... Además de estos ‘primeros
espadas’ acudieron unas 400 personas, entre las que se encontraban: el
ex camisa azul, el incombustible chaquetero-traidor Rodolfo Martín
Villa; el ex ministro franquista Joaquín Ruiz Jiménez, también
conocido como “sor Intrépida”; el ex ‘pepero’ Miguel Herrero y
Rodríguez de Miñón; el ex secretario de la Casa Real, Sabino Fernández
Campo, ex falangista, alférez y teniente de Infantería, que luchó con
la ‘Bandera de Asturias’ en la guerra civil y se hizo el ‘mudo’
ante lo acaecido el 23-F, tapando las vergüenzas de algunos y dejando
en “pelotas” a muchos otros. José María Hidalgo, el gigante
‘engaña-obreros’; Adolfo Suárez Illana, hijo del ex camisa azul,
‘puedo prometer y prometo’ y uno de los destacados perjuros de la
tan cacareada transición; Gaspar Llamazares, posible competidor de
Largo Caballero, en su papel de “Lenin español”; José Barrionuevo,
ex carlista y ex falangista subjefe nacional del SEU y ex presidiario
por lo del GAL; el ex ministro de Interior, electricista y
‘pateador’ de puertas, José Luis Corcuera
Representantes de la ‘kultura’, tales como el
portugués-escribidor Saramago; Rosa Regás, la junta-letras de los
‘best-sellers’ (?); el cantante rojo como las amapolas, Víctor
Manuel, que en sus años mozos dedicó una canción al Caudillo
titulada “Un gran hombre” y cuya letra dice así: «Hay
un país/ Que la guerra marcó sin piedad,/ Ese país/ De cenizas logró
resurgir,/ Años costó/ Su tributo a la guerra pagar,/ Hoy consiguió/
Que se admire y respete su paz./ No, no conocí/ El azote de aquella
invasión./ Vivo feliz/ En la tierra que aquél levantó,/ Gracias le
doy/ Al gran hombre que supo alejar,/ Esa invasión/ Que la senda venía
a cambiar./ Otros vendrán/ Que el camino no habrán que labrar,/ Él lo
labró/ A los otros les toca sembrar./ Otros vendrán/ Que el camino más
limpio hallarán,/ Deben seguir/ Por la senda que aquél nos marcó,/ No
han de ocultar/ Hacia el hombre que trajo esta paz,/ Su admiración,/ Y
por favor,/ Pido, siga esta paz». Este mudable camisero y cantautor
progre, después de asistir a la ‘cena-sorpresa’ dedicada al asesino
de Paracuellos, se dirigió a la plaza de San Juan de la Cruz para ver
como descabalgaban a ese su ‘antiguo gran hombre’, mientras
manifestaba el muy bellaco: “es una noche inolvidable”.
Entre otros que
acudieron a la ‘inquebrantable adhesión’ se hallaban los gloriosos
rojelios Joaquín Sabina, Juan Diego y José Sacristán. La fondona
izquierdista Lola León, devota y admiradora de ZP, como anteriormente
lo fue de Rafael Alberti al que le puso música a algunos de sus poemas,
y colaboradora del PCE,
cuando aún era ilegal. La ganadora del premio la ‘Sonrisa
Vertical’, de novela erótica, Almudena Grandes. Para que no decayese
la fiesta, participó hasta un jesuita, José María Martín Patino, que
había sido vicario de la Diócesis de Madrid con el cardenal Tarancón -que
Dios lo tenga en su gloria, pero que no me pregunte-
y que no tuvo ningún reparo ni remordimiento de conciencia para
homenajear al asesino de miles de compañeros sacerdotes.
También quisieron estar
presentes, para mostrar su admiración y gratitud al benévolo Carrillo
los Leopoldo Torres, Fernando Álvarez de Miranda, Fernando Morán, el
ex ministro de los chistes, el ‘pepero’ Gabriel Cisneros, y el
catedrático Jordi Solé Tura, que del PSUC se pasó a militar en el
PSC, para recalar en la Entensa Catalana de Progrés. El alto
comisionado para las Víctimas del Terrorismo, Gregorio Peces Barbas,
se despachó a gusto, con la siguiente ‘perla’: “Aquí están
los ‘buenos’ (señalando a los de la mesa que presidía el ‘buenísimo’
Carrillo), y los ‘menos buenos’. Los que no están son los
‘malos’”. Se supone que eran ‘malos’ por no querer homenajear
al responsable directo del asesinato de 8.354 inocentes -entre
los que se encontraban mujeres y niños-
en Paracuellos del Jarama.
Y como guinda final, el
actual jefe de la Casa del Rey, Alberto Aza, leyó una
misiva de Don Juan Carlos en la que transmitía a Carrillo su
“respeto y su amistad, fraguada durante muchos años, y su
reconocimiento por la gran contribución a una transición pacífica en
España”. Ello no es de extrañar, después de haber visto los
efusivos y emocionantes abrazos reales al señor Carrillo. Parece que SM
sufre amnesia y no recuerda que su ‘amigo’ le había obsequiado con
el siguiente ramillete de flores: “Juan Carlos es una marioneta que
Franco manipula como quiere, un pobre hombre incapaz de toda dignidad y
sentido político. ¿Qué posibilidad tiene Juan Carlos?. Todo lo más
ser rey por algunos meses”. En octubre de 1974, decía Carrillo del
futuro Rey de España: “Juan Carlos sería el continuador del régimen.
Además se ha desacreditado ante el pueblo español porque vendió a su
padre por una corona y eso no se lo perdonan ni los monárquicos”.
Anteriormente, en el volumen editado en Bucarest en 1972, titulado
“VIII Congreso del Partido Comunista de España”, le dedicó los
siguientes elogios: “Juan Carlos es una criatura de Franco, educada
bajo su control, que ha jurado los Principios del Movimiento, es decir,
los principios fascistas. Sin duda ha prometido en secreto a unos u
otros que cuando reine hará de su capa un sayo y olvidará su origen y
sus juramentos. Sin duda está ya borboneando a diestro y siniestro, lo
que viene muy acorde con las tradiciones familiares. Pero la oposición
no puede dejarse trastear por ese tipo de promesas y guiños, métodos
políticos del siglo pasado totalmente desplazados hoy”.
¿Será tan desmemoriado
SM que también se ha olvidado de sus familiares asesinados por orden de
Santiago Carrillo?. El 1 de noviembre de 1936 eran víctimas del hoy
homenajeado, los siguientes Borbones: Isabel de Borbón Iranzo, Jaime de
Borbón Iranzo, Alfonso de Barbón y de León, Enrique de Borbón y de
León, Luis de Borbón Rich, José de Borbón Rich y Elena de Borbón de
la Torre.
Aparte del reloj de
plata y del libro de recortes de periódicos sobre los 90 años, el
mejor regalo de todos es el que le hizo José Luis Rodríguez Zapatero,
alias “El Frentepopulero”: nada más y nada menos que ofrecerle la
retirada de la estatua ecuestre de su máximo y odiado enemigo: el
Generalísimo Francisco Franco, ‘aliviando’ de esa forma algo del
odio frustrado del brutal asesino ‘don’ Santiago, el cual había
dicho: “Estoy entre los españoles que piensan que ver morir a Franco
en su lecho sería una injusticia histórica. Existen pocos pueblos en
Europa que hayan luchado tanto por la libertad como nosotros y no nos
merecemos verle morir con la ilusión de que su tiranía sea
indestructible. No debe tener esa satisfacción. Debe ver con los ojos
abiertos el fin de su tiranía... Yo no he esperado nunca que Franco
muriese y he hecho todo lo posible para echarle antes. Todavía cuento
con realizarlo antes de que muera... La condena de muerte de Franco la
firmaría”.
Méritos contraídos
por Carrillo para ser homenajeado
Una de las grandes virtudes de Carrillo, es sin
duda su coherencia. Y así, primero fue socialista, luego comunista,
para volver luego a la querencia del PSOE.
Primero adoptó como mentor al demócrata Stalin, para más tarde
abominar del sanguinario dictador, pero sin abandonar el stalinismo.
Primero insultó a don Juan Carlos y luego se ha dedicado a cultivar su
amistad. Primero aborreció la democracia, como buen comunista, y luego
se erigió en campeón de la ‘transición democrática’. Primero
ensalzó a Francisco Largo Caballero y luego lo traicionó.
En 1936 fue un títere de Stalin. En el 2005 es
un vulgar títere de Polanco, y es que siempre le ha gustado estar bien
apadrinado. A todas luces, la congruencia queda demostrada en sus
actuaciones fundamentales.
El genocida fue indudablemente uno de los
responsables máximos de la guerra civil, actuando ya en su preliminar
de la revolución del 6 de octubre de 1934, que fue el origen
desencadenante de la contienda de 1936-1939. El siniestro personaje -hasta
repele llamarlo por su nombre-
se encargó de fusionar las juventudes socialistas y las comunistas para
tener una sola milicia roja en España. Y fueron las Juventudes
Socialistas Unificadas (JSU) las que apoyaban más que ningún otro
sector político la pavorosa campaña largocaballerista de 1936 que
alertó a toda la sociedad contrarrevolucionaria del peligro de
bolchevización de España. Pero la palma se la llevó, el hoy
homenajeado, con su directísima responsabilidad sobre los 8.354
asesinados en Paracuellos del Jarama, amén de buena parte de los 15.000
asesinados en toda la provincia de Madrid durante la guerra civil.
Sobre este trágico suceso y también sobre la
carta renegando públicamente de su padre Wenceslao -demostrativa
de la bajísima catadura moral de ‘don’ Santiago-
los trataremos en un próximo artículo. Entonces podremos comprobar lo
justificado de este homenaje ofrecido a tan distinguido “demócrata”
que ha luchado toda su vida, según manifestó en la cena-homenaje, ‘por
la libertad de España’...
06 de
Abril de 2.005.-
