Sobre las 11:00
horas de la mañana unas doscientas personas se congregaron a las
puertas de la Basílica del Valle de los Caídos, ante la prohibición
explícita de la Delegación del Gobierno de Madrid, de poder entrar
en la Basílica para participar en la Santa Misa, celebrada durante
esas horas por los Padres Benedictinos en memoria de Francisco
Franco y José Antonio Primo de Rivera.
Ante las preguntas
de los congregados en la puerta, la Guardia Civil contestaba que no
había Misa o que estaba suspendida.
Poco a poco en un
clima de tranquilidad y de incredulidad ante el cierra de un lugar
de culto católico por los gobernantes, imagen propia de una
dictadura bananera, las personas congregadas decidieron rezar el
Santísimo Rosario a las puertas del recinto, finalizando con el
canto “Salve Mater”. Posteriormente se canto el Cara al Sol y se
dieron algunos gritos en recuerdo de Francisco Franco y José Antonio
Primo de Rivera. Hay que señalar la presencia de multitud de jóvenes
y matrimonios con niños.
Sobre las 12:30
horas el Teniente de la Guardia Civil intentó convencer a los
presentes de que se disolvieran ante la próxima presencia de los
miembros de la extrema-izquierda, los cuales tenían autorización del
Gobierno Civil de Madrid de concentrarse frente al Valle de los
Caídos. También mandaron quitar todos los coches de la zona, por
miedo a las posibles acciones de los que iban a concentrarse,
incluso los mismos Guardias Civiles quitaron sus propios coches por
si las moscas; ya se sabe, los amantes de la dinamita, un día te
dinamitan una cruz y mañana todos los coches que se encuentren por
su camino, experiencia heredada de familia.
A la 13:05 horas
aparecieron en las inmediaciones dos autobuses, de los cuales
descendieron los típicos marranos –por su suciedad y pelambrera-
portando sus trapos republicanos, con las caras tapadas por
capuchas, bufandas, gafas … -propio de los terroristas, a los que
invocan con sus intenciones de dinamitar la Cruz- en ese momento
unos 40 miembros antidisturbios de la Guardia Civil, formaron un
cordón de seguridad, dejándoles al otro lado de la carretera; lo que
tenemos que agradecer muy sinceramente, porque con su suciedad
hubieran manchado la entrada del recinto.
En ese lugar
comenzaron a berrear sus consignas terroristas, propias de matones y
asesinos: "Madrid será la tumba del fascismo". "Nosotros no
olvidamos"."Esa cruz la tienen que quitar", "Arriba con la goma 2
porque en el valle se prepara, pim pam pum, la demolición" o "Fraga,
quédate sin respiración", "¡A por ellos, como en Paracuellos!". Las
respuestas de las personas normales, desde el otro lado de la
carretera, fue de cantar el Cara al Sol o gritar: "Viva España" y
"Viva Franco", toda una lección de educación para los aprendices de
terrorista.
Llama poderosamente
la atención que el Gobierno Civil de Madrid deje concentrarse a
estos aprendices de terroristas para insultar, amenazar y realizar
apología del terrorismo –mencionando sus métodos asesinos- y prohíba
terminantemente la participación de otras personas en la Santa Misa
de la Basílica, muy propio de la dictadura zapateril que nos toca
padecer en la actualidad, hace leyes de Memoria Histórica para que
las cumplan los Franquistas y no los Frente Populistas.
También hay que
resaltar, que estas asociaciones de vagos y maleantes han recibido
del PSOE más de un millón de euros (BOE del 2 de diciembre de 2009,
con cargo a los presupuestos de 2010, la Federación Estatal de Foros
por la Memoria recibió 450.092 euros y la Asociación para la
Recuperación de la Memoria Histórica obtuvo 558.888 euros), para
buscar huesos, ir de excursión, hacer publicaciones, en resumen
gastarse el dinero en lo que les dé la realísima gana, algo
escandaloso, en una época de crisis económica, con casi cinco
millones de parados y más de un millón de familias sin ningún tipo
de ingreso, lo que provoca que miles de familias lo estén pasando
muy mal, pero ellos pagan autobuses para llevar a todo su ganado
-esperamos que la empresa de autobuses los desinfecte- de excursión
al Valle de los Caídos.
|
|