Más de un
centenar de personas se han concentrado frente a la
Audiencia Nacional en el día de ayer (12/12/2005), para
mostrar su rechazo contra ETA en el trascurso del macro
juicio contra su aparato logística.
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La concentración
a las puertas del juicio contra los cachorros y colaboradores de los
buitres asesinos de ETA estuvo compuesta por unas cien personas,
desde las tres de la tarde hasta las ocho, aproximadamente. En la
concentración estuvieron presentes; la TNS, las Juventudes
Falangistas, los Infoactivistas y numerosas personas de todas las
edades.
En
uno de los momentos de la concentración, una de las personas
concentradas se dirigió a dos individuos con aspecto de “matón”
-descubriéndose posteriormente que eran dos batasunos del periódico
Gara-. A lo que estos
dos individuos requirieron la presencia de la Policía, que al ver
que no pasaba nada y que estos dos individuos batasunos, sólo tenían
ganas de incordiar, se retiraron de la zona.
Según
las fuentes consultadas, estos dos individuos del periódico Gara
presentes en medio de la concentración, comenzaron a incordiar y a
provocar a los asistentes con su presencia y sus palabras,
provocaciones que fueron respondidas con delicadeza y contundencia
por los concentrados. Ante la respuesta de las personas concentradas
los dos batasunos como gallinas a punto de ser degolladas y a voz en
grito, solicitaron auxilio y socorro de las “represoras fuerzas de
ocupación” de su “país”, los que se personaron para proteger
a estos dos individuos batasunos y para identificar a todas las
personas concentradas que estaban a su alrededor.
Otro de los momentos de más tensión,
fue la llegada del autobús dónde eran trasladados todos los
cachorros y colaboradores de los buitres asesinos de ETA, dónde
hubo un momento de confusión en el que al bajarse no fueron
inmediatamente introducidos en la sala, sino que se quedaron en la
calle en actitud desafiante ante los concentrados, provocación que
fue respondida por algunas personas -con los medios que ellos usan
en las calles Vascas- lanzando sobre ellos algunas piedras, que
provocaron en algunos cachorros de ETA, contusiones y magulladuras.
Con esta respuesta, les desapareció las ganas de provocar a los
concentrados y como animales después de una “zurra”, fueron
introducidos en la Casa de Campo, lugar dónde se está celebrando
el macro juicio contra el aparato logístico de ETA.
También
hubo alguna escaramuza con alguno de los familiares de los cachorros
de ETA presentes en la zona, que increpaban a los concentrados,
intentando coartar la libertad de expresión de los presentes, método
que ellos usan muy bien y con toda libertad en las ciudades Vascas,
pero no en Madrid.
Durante
la concentración se grito: ¡ETA pena de muerte!, ¡a la Kale
Borroka patada en la boca!, ¡Viva España! ...
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