HONOR
PRIMERO, LUEGO DINERO
Por J.
Esteban.
Hace unos días el
ministro de Defensa, José Bono, anunciaba la inminente subida de
sueldos a favor de los que prestan servicio en el Ejército Español en
función a la responsabilidad de cada uno. “A bote pronto” parece
una buena medida, ya que el sueldo que se paga en el ejército, sobre
todo de soldado a suboficiales, es bastante escaso por no decir
irrisorio.
Si esta medida se
lleva a cabo este señor y su líder, ZP, se prodigarán en los medios
como los máximos benefactores del Ejército Español –pidiendo después
encarecidamente perdón a Rovira y algún otro y compensándolo
posteriormente- siendo los dos personajes que más han humillado a
nuestro ejército en los últimos años sin ninguna duda.
Lo que el ejército
necesita es recuperar la popularidad que le han quitado los políticos
entre la población española, recordemos los últimos “favores” de
Bono y ZP al ejército: quitar el lema de la Academia de Suboficiales
que rezaba “A España servir hasta morir”... ¿a petición de Rovira
o por iniciativa propia?, han cambiado la letra de la oración a los caídos
-¿cómo se puede homenajear a los caídos por la patria si no se puede
hablar de que hayan caído por España?-, pulverizando y ridiculizando
el juramento a la Patria, juramento que hoy en la sociedad tan
“solidaria” –solidaria con inmigrantes, delincuentes, drogadictos,
terroristas...- suena a risa y que gracias al lavado de cerebro de esta
gente no se dan cuenta, que no existe mayor solidaridad que la de jurar
proteger con tu vida a toda España y a todos los españoles.
Así pues lo que
necesita el Ejército no necesita una subida de sueldo, lo que necesita
es recuperar el honor perdido de los últimos 25 años, el Ejército
Español necesita volver a estar al servicio de la voluntad del pueblo
español y no ser un enviado a países remotos para quedar bien con un
presidente de otro país, los soldados deben entender su juramento de
compromiso, deben entender su obligación de dejar el nombre de España
y del Ejército en buen lugar y deben entender su gran responsabilidad
al ser miembros del Ejército que conquistó medio mundo para el Imperio
Español, en el que nunca se ponía el Sol, y sólo así el se convertirá
en el digno heredero de los gloriosos tercios heroicos españoles.
Así que, señor Bono,
no nos intente engañar, el ejército necesita honor y respeto, y luego
lo demás.
08 de Agosto de 2.005.-
