NO SE PUEDE CALLAR
Ana María García
El martes 28
publica "La Opinión de Málaga" una carta del militante
socialista Juan Bertuchi donde demuestra ser aventajado discípulo de ZP.
Habla de un pulso de la Iglesia contra el gobierno, ¿no será al revés?,
porque, Señor Bertuchi, la jerarquía eclesiástica expone legítimamente,
"a tiempo o a destiempo", como dice San Pablo en el Nuevo
Testamento, la doctrina evangélica como es su deber.
Más aborto, bodas gay, divorcio express, eutanasia, no a las clases de
religión católica... todo esto no es un adelanto social como usted
dice, sino todo lo contrario. Es atentar contra la vida del no-nacido y
del tetrapléjico, rechazando a ambos como inútiles y dándose un poder
similar a Dios. El divorcio va contra la concepción tradicional de la
familia, etc.
Califica Juan Bertuchi de "obsoleta" a la Conferencia
Episcopal por no rendirse a la política zapateril. La Iglesia no
necesita desempolvarse como éste señor dice, lleva dos milenios
realizando en todo el mundo una ingente labor social, espiritual y
humana.
Se ve que visita poco las parroquias cuando habla de "templos vacíos".
Acérquese, la mayoría no tiene éste problema. Según el CIS somos
casi nueve millones de españoles los que asistimos a misa cada fin de
semana, algo que no soporta ni usted ni el gobierno de Zapatero, de ahí
viene el despellejamiento que somete a los católicos y a su Iglesia.
Pretenden arrinconar totalizadoramente la voz de la Iglesia, amenazan
permanentemente con quitar subvenciones a ésta, pero no a las demás ni
a partidos políticos como el socialista que pagamos con nuestros
impuestos todos los españoles y que no respeta nuestros derechos
fundamentales.
28 de
Septiembre de 2.004.-