En todos estos casos, la demanda de electricidad ha
aumentado a más de un 8 por ciento anual, frente al 6,4 por ciento del
sector de clientes domésticos. Por este motivo, aseguró que la
implantación de un sistema de tarifas progresivas, en función del
consumo, para tratar de reducir la demanda y penalizar el derroche será
"un fiasco". "Ya tuvimos una experiencia en los años 80
y aquello no funcionó", apostilló.
Es vergonzoso que ante esta situación dependemos de
Francia y de Marruecos, de dónde procede gran parte de la energía que
consumimos, lo más propio de un país tercermundista. Vivimos de las
rentas de la "abuela" y la "abuela" tarde o temprano
se tiene que morir, por lo que se nos acabará las rentas. Pero el
Gobierno no tiene ningún plan para solucionar esta escasez de energía eléctrica.
Los problemas del consumo eléctrico en España,
también repercutirán en la disminución del Turismo, los turistas no
acudirán a un país que en cualquier momento se les puede cortar la
luz, dejarles sin aire acondicionado o quedarse colgados en el ascensor.
También la energía es imprescindible para que la
industria siga creciendo, y España siga desarrollándose.
Pero ante estas limitaciones el Gobierno Socialista no
tiene ningún plan para solucionar esta carencia de energía, sólo se
le ocurre sancionar a las personas de bajo poder adquisitivo, si usan
mucho el aire acondicionado o el ventilador, mientras los "politicuchos"
estarán disfrutado de un aire acondicionado a toda marcha, pues ellos
están exentos de las cartillas de racionamiento energético.
Volvemos a los años añorados por los Socialistas.