Más
de 600 personas dan el último adiós a Juan Antonio Palmero
Unas 600 personas
acudieron ayer al funeral del guardia civil Juan Antonio
Palmero, que falleció en Navarra tras ser tiroteado, junto a
otro compañero, José Antonio Vidal. El acto tuvo
lugar ayer por la mañana en el Tanatorio El Niño Jesús de Ronda,
ciudad en la que residen sus padres y en cuyo cuartel de la Guardia
Civil estuvo destinado el agente dos años mientras prestó servicio
en la localidad malagueña de Cañete la Real, de donde es su esposa.
El féretro, que llegó al tanatorio malagueño en torno a las 05.00
hora de ayer, estuvo custodiado por varias motos de la Guardia Civil
de Tráfico, así como por dos helicópteros de la misma agrupación,
que han permanecido en los alrededores del aeropuerto hasta que ha
salido con destino a dicha localidad.
Al sepelio, que fue oficiado por el párroco Alonso Ros y al que han
asistido amigos, familiares y compañeros de los diferentes Cuerpos
Seguridad, también contó con la presencia del subdelegado del
Gobierno en Málaga, Hilario López Luna, quien a la entrada del
tanatorio dijo que "es un momento difícil" y expresó su
"pésame a la familia del guardia civil".
Estuvo presente el general jefe de la Benemérita de Andalucía, José
Píriz, quien dijo que "es un día triste para la Guardia Civil y
más cuando se produce una muerte inesperada e imposible de
prevenir".
Diario
Málaga. 11 de Junio de 2.004.-
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