El General Galindo es tratado como un perro, sin tener ningún tipo de derecho, ni reconocimiento por su gran labor contra el terrorismo.

    El jueves día 5 se le impidió asistir al funeral de uno de sus hombres, el comandante Gonzalo Pérez García, herido de muerte en Irak.

    Cuando a un preso con delitos de sangre o incluso terroristas de E.T.A. están siendo tratados con más dignidad que al General Galindo.

    La justicia Española defiende a los terrorista para ponerlos con prontitud en la calle y a los que actúan en nombre de la justicia y el orden son encerrados sin ningún tipo de derecho, ni para acudir al funeral de sus muertos.

  © Generalísimo Francisco Franco. 8 Febrero de 2.004.-


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