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LIBRO FIRMAS

SUGERENCIAS

 

Discursos y mensajes del Jefe del Estado, 1960.


 
Palabras con ocasión del XXV Aniversario del periódico «Arriba».

Madrid, 23 de marzo de 1960.

Constituye para mí una satisfacción el recibiros y el tener ocasión de expresaros el reconocimiento de la Patria a toda vuestra labor constante de estos veinticinco años.

El tiempo transcurrido no ha envejecido nuestro Movimiento ni nuestra doctrina. Ha pasado un cuarto de siglo, pero nuestra doctrina aparece hoy tan lozana como aquellos primeros días, cuando tantas veces cos- taba la muerte el proclamarla y el sacar y vender nuestro periódico.

«Arriba» ha mantenido a través de estos veinticinco años nuestra doctrina, muestras inequívocas de patriotismo, de unidad entre los españoles y las tierras de España, sosteniendo la bandera del Movimiento Nacional a través de todos los avatares.

El Movimiento Nacional ha tomado hoy una dimensión mayor que la que tenía en los momentos de nacer vuestro periódico; porque si entonces su interés se circunscribía a lo nacional, representando una solución a los problemas de España, hoy la doctrina del Movimiento Nacional y sus realizaciones se ofrecen como solución a problemas similares de muchísimos países.

PROBLEMAS UNIVERSALES

Los problemas de España se han hecho hoy problemas del mundo. Los viejos y caducos sistemas liberales ya no sirven para satisfacer las ansias de los tiempos modernos. Hace falta crear otra cosa, hay que buscar soluciones políticas nuevas al atraso secular de la marcha de los pueblos. Ya no pueden aceptarse aquellos viejos conceptos de derechas e izquierdas, tan desacreditados. La Patria y lo social no pueden estar en pugna.
Lo social depende directamente de la buena marcha de la Patria. El progreso de la Patria puede lograr la grandeza de lo social; con la miseria no se logrará en ninguno de los caminos el avance y la mejora del nivel de vida, y estas ansias de mejora social alcanzan ya a todos los países del Universo.

Adondequiera que dirijamos la mirada, a los pueblos del Norte como a los del Sur, al Este como al Oeste, percibimos ese mismo sentimiento: los anhelos de una vida mejor. No importa el continente ni las razas. La fiebre alcanza a todo el Universo. Se quiere la mejora del nivel de vida, se ansía la justicia social, se exige la eficacia, y todo esto es imposible el realizarlo con la división entre los hombres, con la lucha de clases, con todas esas lacras que la sociedad moderna padece y de las que nosotros nos hemos redimido por el esfuerzo del Movimiento Nacional.

Por eso digo que el Movimiento Nacional no es un Movimiento ocasional que exclusivamente sirva para resolver nuestros problemas. Podemos estar orgullosos de que el genio de José Antonio, al concebirlo, y vuestra constancia y fidelidad, al servicio durante todo este tiempo, puedan hacer que sirva de ejemplo al mundo para que éste pueda buscar soluciones políticas modernas para sus problemas; soluciones que, como la nuestra, no están enfrentadas con la democracia ni con el espíritu de la democracia, sino todo lo contrario. La democracia no se forjó en el siglo XIX. La concibieron ya los griegos con veintitantos siglos de anticipación, y en cada Era se sirvió con las fórmulas prácticas que el adelanto de la civilización permitía.

INTERPRETACIONES DE LA DEMOCRACIA

¿Por qué huye la vieja política de las naciones de la expresión más clara y directa de la democracia, que es el referéndum? ¡Ah!, porque no se quiere que la democracia sea sincera, porque lo que los partidos quieren es un artificio de la democracia, una interpretación completamente falsa de la democracia, el poderla implantar a través de los partidos políticos; y se llega al caso peregrino de que un padre de familia que sostiene una familia, vea desmentida su voz, que debiera tener un peso en la Patria, por la de su mujer o la de sus hijos.

¿Es una democracia que los hombres y los intereses de los hombres, que se centran en la localidad, en la religión, en el trabajo, en la profesión, se anulen materialmente porque unos militan en la derecha y otros en la izquierda, porque unos se sienten socialistas y otros capitalistas? ¿Es ésta la solución o es más sincero y democrático que sea en los órganos naturales donde el hombre discurre y se encuadra, donde se exprese la voz de la democracia?

LIBERTAD COMPATIBLE CON EL ORDEN

Nosotros no negamos la democracia; nosotros queremos ser fieles a la democracia. ¡Ah!, pero no queremos que las libertades se pierdan en la anarquía; amamos las libertades, pero una libertad compatible con el orden, porque en el desorden naufragan todas las libertades.

Por todo ello, podemos hoy, a los veinticinco años, sentirnos con la misma juventud, con el mismo espíritu, con la misma novedad de doctrina y, lo que es más, con una eficacia indiscutible. Por eso la tarea del periódico «Arriba» se ennoblece conforme pasa el tiempo y toma una dimensión mayor, una dimensión universal, convencidos de que éste es el único camino y fuera de él están la anarquía y el caos.

Muchas gracias a todos, y felicidades. 

¡Arriba España!


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