La muerte de Fernando Vizcaíno Casas cierra un capítulo en la memoria literaria de una época Falleció
a las tres de la tarde de ayer, víctima de un cáncer. Hoy será
enterrado en Navacerrada. El jueves sale a la venta su novela póstuma:
«Nietos de papá»
Fernando Vizcaíno Casas, novelista, dramaturgo y abogado, trabajó
hasta los
últimos días, a pesar de su enfermedad, según declaró su hijo
Eduardo: «Incluso alternaba las sesiones de
quimioterapia y radioterapia con escribir y su trabajo en el despacho de
abogado». Fruto de esa labor durante su enfermedad será un
libro póstumo, «Nietos de papá», que
Planeta pondrá en las librerías a partir del jueves. Precisamente,
2003 está siendo un año horrible para la editorial, que ha perdido a
tres de sus grandes baluartes en apenas seis meses: Terenci Moix, Manuel
Vázquez Montalbán y ahora Fernando Vizcaíno Casas.
Las reacciones a su muerte no se hicieron esperar. El secretario general
del Partido Popular, Mariano Rajoy,
envió un telegrama de pésame, en su nombre y en el de todo el PP, a
los familiares del escritor, cuya muerte «supone
una gran pérdida para la cultura española». El ministro de
Trabajo y Asuntos Sociales y Portavoz del Gobierno, Eduardo
Zaplana, lamentó la muerte de «uno de
los máximos exponentes de las letras españolas». Antena 3, de
la que el escritor fue asesor jurídico, lamentó asimismo su muerte.
En noviembre de 2002, Fernando Vizcaíno Casas publicó la tercera parte
de sus memorias, «Los pasos contados»,
donde combinaba sucesos y anécdotas de la sociedad española del último
cuarto del siglo XX con su vida personal. Algunos de sus títulos más
conocidos son «Y al tercer año resucitó»,
«Contando los 40», «¡Viva
Franco! (con perdón)» e «Hijas de María».
En los años 90 publicó varias crónicas sobre fechas importantes de la
época franquista, como «1975. El año que Franco
murió en la cama», «1973. El año en que
volaron a Carrero Blanco» y «1969. El año
en que Franco hizo Rey a Don Juan Carlos». Una vida ligada a una época
Fernando Vizcaíno Casas nació el 23 de febrero de 1926 en Valencia. Crítico
de cine, trabajó en los diarios «Las Provincias» y «Jornada», de
Valencia. En 1949 obtuvo el premio teatral para Universitarios
Hispanoamericanos con «La senda iluminada». En 1950 ganó con «Los
derrotados» el premio para noveles; en 1951, «El
baile de los muñecos» fue premio Nacional de Teatro Calderón
de la Barca; y en 1953 «El escultor de sus sueños»
consiguió el Valencia de Teatro. Entre 1963 y 1965 trabajó para TVE
como guionista de telenovelas y otros programas, tras lo cual recibió
la Medalla del Círculo de Escritores Cinematográficos a la mejor labor
literaria (1966), el premio del Ministerio de Información y Turismo a
la mejor labor periodística en materia cinematográfica (1966) y el
premio periodístico Fundación Nacional Francisco Franco (1978).
Especializado en la problemática jurídica del teatro y los actores,
publicó «Summa de legislación del espectáculo»
(1962) y «La nueva legislación cinematográfica
española» (1964).
Su lanzamiento literario se produjo con la novela «Contando los 40»
(1971), que convirtió a Vizcaíno Casas en uno de los autores que más
ventas ha cosechado en España. Pero su primer gran éxito lo conseguiría
con «Y al tercer año resucitó» (1978).
Así, en tan sólo 15 días vendió 80.000 ejemplares de «Las
autonosuyas» (1981) y, a finales de 1983, coincidiendo con la
aparición de «Hijas de María», el
conjunto de su obra superaba los dos millones de ejemplares vendidos.
Fue elegido en 1984 «Escritor del Año» por Planeta y los libreros de
Madrid. Estaba casado y tenía tres hijos, uno de ellos. Eduardo, publicó
la primera biografía sobre el escritor, «Fernando
Vizcaíno Casas, mi padre» (1996). ABC,
3 de Noviembre de 2.003 |