Otra misión cumplida.


Por AguilaEs. 23/10/2007.  


-Mamá, mamá, voy al cine a ver “las trece rosas”, que dicen que es una película muy bonita y se llora mucho.

-Vale hija, A ver si voy yo también a ver que tal es.  ¿de que trata?

-Pues de unas pobres chicas que las matan los malos, los de Franco y tal.

-Hija, no digas eso, que tu abuelo luchó con Franco.

-Bah, estaría equivocado el pobre, yo prefiero ser demócrata, que es lo guay. Seguro que al abuelo los fascistas malos le obligaron a luchar con ellos. Con lo buena persona que era el abuelo ¿cómo va a luchar con Franco? Es imposible.

-No sé , hija, no sé, qué cosas tienes, pues él bien orgulloso que se sentía de lo que hizo. ¿y cómo te has enterado de ésa película?

-Ví un reportaje muy bueno en Telemadrid, y ésta mañana han hablado mucho de ella en la COPE. Creo que se llora mucho. También leí que el alcalde Gallardón les había puesto una calle. Además mi profe de historia de la facultad nos ha dicho que vayamos a verla y hagamos un trabajo de la peli, si no, nos suspende.

-Vale hija, ve con cuidado.

***

-Mamá, ya estoy en casa

-¿qué tal la película?, hija

-Jo mamá no he podido parar de llorar

-¿si?

-Que horror, que malos eran los franquistas, yo creo que había que hacer un homenaje importante a estas pobres chicas.

-No se, hija, tus tíos eran falangistas y los mataron los rojos y tenian la misma edad que esas chicas, y nadie les hace homenajes, es más, en el pueblo les van a arrancar la placa que les recordaba, por orden del gobierno.

-No puede ser, ¿mis tíos falangistas? ¡Que trauma!, vengo de una familia de monstruos. ¡buaaaaaa!

-Que no hija, que no, que lucharon por sus ideas y les fusilaron

-No, no, prefiero no recordarlo, yo soy demócrata como la gente normal. Jo. Pobres trece rosas. Habría que quitar ya de una vez los nombres franquistas de las calles. No comprendo como a esos malos que mataron a las pobres trece rosas se les sigue teniendo por ahí en los nombres del callejero.

-Pero hija, ¿te has vuelto loca? 

***

Mientras, en un despacho oscuro, lleno de muebles lujosos, acciones de empresas de comunicación, en una mesita descansa un periódico-basura de los que regalan en el Metro cuyo titular dice “España llora con las Trece Rosas”. Allí unos hombres con un extraño mandil y expresión de macho cabrío goyesco, sonríen dejando ver su dentadura de oro y murmuran “Otra Misión Cumplida”.

 

Artículo de opinión extraído de la página: www.generalisimofranco.com