Los métodos gansteriles de los cachorros del PSOE.

Noticia tomada en parte del diariodepozuelo.es

06/10/2006.  

Cuatro individuos uno de ellos Lucas Barón Plana, fueron detenidos el pasado  6 de septiembre cuando presuntamente causaban graves destrozos en el colegio Monte Tabor, es sobrino del socialista Enrique Barón Crespo, presidente del Grupo Parlamentario Socialista Europeo.

Estos cachorros del PSOE entraron por la mañana del día 6 de septiembre en el colegio concertado religioso Monte Tabor, situado en Pozuelo de Alarcón,  y destrozaron sus instalaciones. Forzaron las puertas de entrada de sus tres edificios y rompieron puertas, cristaleras, ventanas, sillas y mesas; esparcieron libros por el suelo, inundaron la planta baja y pintaron las paredes con consignas como «PP muerto» y «puta Iglesia», además de símbolos anarquistas, cruces gamadas y célticas.

El portavoz del colegio, Gabriel Cortina, ha relatado que «han usado los extintores, que han vaciado previamente, como proyectiles para romper los cristales de las ventanas. También han utilizado las pinturas de los niños para pintar los pasillos, las aulas, las sillas, las mesas…Una pena. Esto no conduce a ningún sitio».

Los vecinos de la zona de Arroyo Meaques, oyeron fuertes ruidos que provenían del interior del centro alrededor de las siete de la mañana y avisaron a la policía. Los agentes detuvieron a uno de los supuestos atacantes, A.H.V. de 21 años que iba indocumentado. Sus otros tres compañeros huyeron en un Opel Astra blanco.

Adrián de las Heras, de 21 años y vecino de Roque Nublo, se confesó culpable en la declaración policial y delató a otros dos compañeros, uno de ellos el sobrino del eurodiputado socialista. En la declaración aseguró que la intención del ataque al colegio era la de confundir e involucrar a grupos neonazis como los responsables de los actos. El joven agregó que tanto él como los dos compañeros a los que delató –aunque es sabido que existe una cuarta persona a la que se ha ocultado cuidadosamente su identidad- se encontraban en estado de embriaguez cuando accedieron al colegio. Sin embargo, fuentes del colegio Monte Tabor han asegurado a este medio que los asaltantes llevaban guantes para, presuntamente, obstaculizar el trabajo de la Policía Científica.

Estos cachorros del PSOE accedieron al colegio, forzaron la cerradura; destrozaron ventanas, mobiliario, vaciaron extintores y realizaron pintadas del tipo «PP muerto» y «puta Iglesia», además de dibujar cruces gamadas en las paredes. Los daños se han cuantificado en 20.000 euros y en la acusación se han personado los responsables del colegio Monte Tabor por daños y el PP de Pozuelo por su parte se personará por amenazas. El Ayuntamiento de Pozuelo no ha querido valorar esta información alegando que está sub iudice.

A pesar de los destrozos acaecidos, el centro educativo comenzará el curso escolar la próxima semana, tal y como estaba previsto, y celebrará su inauguración oficial el día 18 de octubre.

Monte Tabor: El colegio de la discordia

Desde el pasado mes de enero se suceden controversias en torno a la construcción del colegio Monte Tabor en Pozuelo. Se trata de un nuevo proyecto escolar basado en la separación, en determinados cursos, de los niños y las niñas que ha originado las protestas de unos que consideran esto anticonstitucional y anticuado y el aplauso de otros que se amparan en la libertad de elección del centro educativo por los padres. La polémica está servida.

Pocas veces una noticia de Pozuelo ha tenido tanta repercusión mediática como está siendo el caso de la construcción del colegio Monte Tabor. Este hecho ha propiciado un considerable enfrentamiento entre las distintas fuerzas políticas del municipio, llegando a extenderse hasta los más altos estamentos de la Comunidad.

Todo comenzó en octubre de 2003 cuando el Ayuntamiento de Pozuelo firmó un convenio con la Comunidad de Madrid para la construcción de un colegio público en la zona de Arroyo Meaques. El 20 de abril del pasado año el consistorio adjudicó a la fundación “Tiempos más Nuevos”  un derecho de superficie de una parcela destinada a la construcción de un nuevo colegio concertado.

Esta medida levantó las iras de algunas familias del municipio que demandaban al Ayuntamiento la construcción de un colegio público y no de enseñanza concertada. Ante estas críticas, el equipo de gobierno de Pozuelo alegó que la mayor demanda de plazas escolares cada año se centra en los colegios concertados y privados, además de existir un excedente de 500 plazas en los colegios públicos de la localidad.

Tras esto, las críticas no cesaron cuando se conoció que el Ayuntamiento autorizó a la Fundación encargada de construir el colegio, a hipotecar el terreno en ocho millones de euros y quince años, eximiéndola posteriormente del pago total del impuesto de obra y del 95% del impuesto de construcciones. Posteriormente, a finales de febrero de este año, el Ayuntamiento autorizaría a la Fundación a ampliar el importe de la hipoteca a catorce millones euros en un plazo de 20 años, lo que generó un gran número de críticas.

Eva Izquierdo, portavoz del PSOE de Pozuelo, calificó de «autentico chollo las facilidades que se le están dando a la Fundación Tiempos más Nuevos para que abra su nuevo centro educativo» criticando la actitud del equipo de gobierno del PP «al destinar un terreno municipal a la construcción de un colegio concertado y no público como se comprometió en su programa electoral». Estas acusaciones fueron respaldadas por la Plataforma por la Escuela Pública que en varios plenos municipales mostraron pancartas contrarias a la construcción de este colegio.

Frente a estas opiniones, Mario de Utrilla, primer teniente de alcalde y portavoz del PP, achacó las críticas del PSOE a «cuestiones ideológicas que se basan en la actitud que tiene el Partido Socialista ante cualquier colegio concertado que se abre en la Comunidad».

Ante semejante aluvión de críticas de los distintos grupos políticos, la Fundación Tiempos más Nuevos hizo público un comunicado con motivo de «las distintas informaciones inveraces» en el que afirmaba que «el colegio Monte Tabor cuenta con todos los requisitos legales y administrativos necesarios, tanto de la Comunidad de Madrid como del Ayuntamiento de Pozuelo de Alarcón».


Enseñanza con separación de sexos

Uno de los aspectos más polémicos del caso del colegio Monte Tabor se dio al conocerse la intención de impartir un sistema educativo basado en la separación de sexos en algunos de los cursos.

Según la Fundación Tiempos más Nuevos, titular del futuro colegio, «la educación que se imparte no es una educación separada, sino un colegio mixto, separado en algunos cursos desde los diez años hasta 4º de la ESO». Igualmente, los responsables de la futura escuela han afirmado en repetidas ocasiones que «la educación diferenciada está en la vanguardia de la investigación pedagógica en muchos países europeos y Estados Unidos, avalada por prestigiosos profesionales del mundo educativo».

Al conocerse la idea del modelo de educación a impartir en el futuro colegio comenzaron a sucederse las críticas. Eva Izquierdo declaró que «la actitud del PP en Pozuelo está generando una seria preocupación entre los ciudadanos ya que resulta inadmisible que se apoye con recursos públicos a una entidad privada que promueve un proyecto educativo basado en la segregación entre niños y niñas».

El asunto llegó a la Asamblea de Madrid al referirse a la situación Rafael Simancas, anunciando que no descartaba acudir a los tribunales ya que «el nuevo colegio podría vulnerar el artículo 14 de la Constitución, que promueve la igualdad absoluta entre hombres y mujeres». Junto a estas declaraciones cabe destacar las del diputado socialista Adolfo Navarro en las que calificó el proyecto del nuevo colegio como «un pelotazo que promueve la segregación de los niños y las niñas y tiene un ideario franquista», declaraciones propias de un sectario e intoxicador.

Ante el amplio abanico de opiniones vertidas sobre la construcción del nuevo colegio, el equipo de gobierno del Ayuntamiento de Pozuelo alegó que esta separación por sexos “sólo se hará efectiva en determinados cursos y asignaturas debido a las diferencias del desarrollo madurativo de las niñas respecto a los niños en determinadas edades».

Otro de los aspectos más polémicos en referencia al nuevo colegio es la petición de un depósito de 1.750 euros que se pide a los padres por inscribir a sus hijos.

José Antonio Pertegués, futuro director del colegio Monte Tabor, explicaba que «este dinero no es un donativo sino un depósito a devolver para que nos ayuden a construir el colegio y no endeudarnos tanto con los bancos». Asimismo puntualizó que «se tratan de préstamos totalmente voluntarios que no están vinculados a la admisión de plaza, que está sujeta a una baremación». Pertegués destacó también que en las primeras semanas se han superado las expectativas con un número de solicitudes mayor que el de plazas disponibles.

Manifestación en apoyo del colegio Monte Tabor

El pasado 11 de marzo, unas 250 personas participaron en una manifestación convocada por el Foro Español de la Familia y la Asociación de Madres de Pozuelo, en apoyo del colegio Monte Tabor. La marcha bajo el lema «por una educación de calidad en libertad» finalizó en la plaza del Ayuntamiento con la lectura de un comunicado en defensa de la libertad de elección de los padres sobre el centro educativo de los hijos.

En la manifestación, a la que acudieron a título personal Jesús Sepúlveda, alcalde de Pozuelo, y varios concejales del equipo de gobierno, el futuro director del colegio Monte Tabor defendió el sistema pedagógico que se implantará argumentando que «fomenta mejor el desarrollo de la familia en todos los sentidos».

Por su parte, Isabel López, portavoz de la Plataforma por la Escuela Pública de Arroyo Meaques, consideró que los participantes a la manifestación «para nada representan a las madres de Pozuelo ya que son representantes de unos intereses políticos, ideológicos e incluso religiosos de la gente de Monte Tabor».

Noticia extraída de: http://www.generalisimofranco.com